En esta parashá Moshe enumera todas las bendiciones que recibiremos si nuestra vida se sumerge en el cumplimiento de los principios de la Torá, y nos habla de poseer la tierra prometida, la abundancia de sus frutos, la seguridad en nuestras ciudades y pueblo, la alegría de ver felices a nuestros hijos.  Podríamos decir que las bendiciones son el resumen de una vida ideal.

Por otro lado también declara que estas mismas bendiciones se pueden transformar en maldiciones, ya no habrá posesión de tierra, las cosechas serán pobres, las ciudades y pueblos serán destruidos, nuestros hijos muertos o vendidos como esclavos, y todo este mal por alejarnos de la voluntad divina.

Moshe como profeta declaró las profundas desgracias que acontecerían a nuestro Pueblo a partir de la destrucción del Segundo Templo, cuando fue destruida Jerusalem y nos aplastaron las legiones romanas de Tito. Moshe habló de este desastre.  Nuestro Mashiaj Yeshua también predijo claramente la destrucción de Yerushalaim.

Es interesante que la tradición oral tuvo un punto de desarrollo propio y con autoridad en el período comprendido entre el primer y segundo Templo (shofrim –escribas; farisim; tzadiquim) y esto no ayudó a prevenir la catástrofe, porque la razón es vivir lejos de los principios de la Torá.

Nosotros, los judíos mesiánicos tenemos una identidad simple y clara, somos judíos que vivenciamos la mayor de todas las bendiciones: la armonía con Adonai.
Iosef Shemi
Rabino Mesiánico

Ki Tavo (2)

A las puertas del ingreso a Eretz Israel, Adonai manda a Moshe a elegir piedras donde se escriba la Tora.
El significado de esto ha sido debatido por largos siglos en el Pueblo de Israel. Para unos el texto que se escribió son lo diez mandamientos, para otros toda la Tora ya que eran piedras gigantescas.
En cuanto a la orden de escribir y elevar estas piedras la idea seria que recuerden por y  para que llegan a la Tierra Prometida. Además, que cuando pase un nuevo peregrino las vea como señal, las lea y conozca en la tierra de que pueblo esta por ingresar.
Podríamos preguntarnos: para que volver a escribir lo que ya les fue dicho de muchas maneras antes?
La respuesta la encontramos en que no siempre lo que decimos que sabemos, es lo que finalmente hacemos.
No tenía ningún sentido el haber preparado un pueblo para una acción especial, vivir de acuerdo a los mandamientos divinos, y que cuando llegue la hora, no lo hagan.
también por ello es que posteriormente se dirán las bendiciones por vivenciar  la Tora  y las maldiciones por no hacerlo.
La realidad del hombre es que siempre creemos que sabemos, cuando en realidad siempre ignoramos; es mas lo que desconocemos que lo que podemos afirmar.
Por otro lado, si fijamos el conocimiento y no lo articulamos con la vida diaria, observando con el corazón como criterio de referencia al decidir una acción, haremos que aquello que decimos conocer sean solo letras en una piedra.
En este orden del saber y del conocer de Di-s, es que Yeshua elevo la ética y la moral
por sobre el conocimiento mental y la practica diaria excesivamente rígida y monótona.
Las piedras son necesarias para que el texto este inscripto, pero a ella hay que sumarle el corazón para leerlo.
Con inmenso amor
Iosef Shemi
Rabino Mesiánico

Ki Tavo (3)

La medida del Cielo queda expuesta en esta parasha, en la cual las tribus serán divididas en dos entre el monte Heival y el Guerizin, y en la narración que harán sobre la bendición y el castigo de cada acción narrada…es decir…Adonai nos ofrece la posibilidad de ser benditos y malditos, en nosotros queda la decisión de optar por el bien: cumplir sus mandamientos.
En el extremo del enojo divino se ubica la Dispersión de Israel , y en el extremo del perdón divino se ubica la reunión final de las tribus con la acción única del Mesías, quien en su presentación como Mashiaj ben David realizará.
Mientras eso sucede, nosotros tenemos la posibilidad de corregir nuestro sendero diariamente, con tefila ,tzedaka y talmud Tora ( oración, dando ayuda al necesitado, y estudio de la Tora)…tanto tiempo le dedicamos al Cielo tanto tiempo el Cielo nos estará recibiendo….medida por medida.
Recordemos ahora las palabras de Yeshua HaMashiaj en Matitiahu 5, ashrei anei ruaj ki lahem maljut hashamaim….felices o bienaventurados o ricos son los pobres de espíritu ( humildes,los que no tienen ietzer hara o gaba – orgullo-) por de ellos es el Reino de los Cielos. Yeshua nos esta aclarando que esa es la kavana, intención,  que produce el acercamiento del cielo al hombre….medida por medida….cuanto mas te vacías de arrogancia y propio sostén mas te llena la shejina, la presencia divina.
Brajot bezejut shel Yeshua HaMashiaj, bendiciones en los méritos de Yeshua el Mesías.
El rabino
Iosef Shemi