Santos seréis ya que santo soy Yo, nos dice Adonai en esta Parasha, la Parasha por excelencia de la santidad.
El término Kadosh (santo) se ha entendido de acuerdo al pensamiento griego como lo apartado, mientras que  el pensamiento y la lingüística del hebreo nos hablan de kadosh como lo consagrado.
Un ejemplo claro de esto es al Cohen Gadol (sumo sacerdote) quien es kadosh, pues esta íntegramente consagrado al servicio en el Mishcan (tabernáculo) y mas tarde en el Beit HaMikdash (Templo).
Y justamente la razón para que el hombre sea kadosh es que la esencia del mismo Señ-r es la Kedusha (santidad).  El esta plenamente consagrado a su creación y sus criaturas.
Pero, ¿como consagrarnos los unos con los otros? Como nos dice la Tora en esta porción semanal amando al prójimo como a nosotros mismos.
Cuando Yeshua enseñó sobre el prójimo nos aseveró las palabras del sabio Hillel”, Lo que te resulta odioso no se  lo hagas a tu prójimo. Esta es toda la Tora, el resto son comentarios…”
Nos quedaría por preguntarnos ¿quién es el prójimo? La respuesta nos la da la misma Tora al decir de los egipcios como tu prójimo (Shemot 11:2), lo que le da el alcance amplio que la misma tiene, y aun más Yeshua nos muestra que todo hombre se convierte en nuestro prójimo.
El Mashiaj nos dice que seamos perfectos como lo es Adonai, y la única manera de llegar a ello es mediante el camino que El mismo nos enseñó, puesto que consagración completa de nuestra vida sólo puede darse mediante el Ruaj HaKodesh (Espíritu Santo), y esta morará en nosotros si estamos purificados de nuestros errores frente a Di-s.
Sigue a Yeshua HaMashiaj , y El te conducirá a la vida Eterna.

Iosef Shemi
Rabino Mesiánico

Kedoshim (2)

Los Sabios de Israel, aquellos que interpretaron con amor la Tora y que siempre han vislumbrado los tiempos mesiánicos, nos dicen que esta porción de la Escritura es tan importante como Aseret Hadribrot, los diez mandamientos.
Durante toda su lectura observaremos preceptos dados en plural, para todos los individuos, y otros en singular, para cada individuo, y todos ellos en su conjunto, rodean el principio de los principios: Seremos Santos por la causa de que El, Bendito Sea Su Nombre, es Santo. Las implicancias de que la consagración a El vamos, el resto es tiempo perdido en la historia del tiempo.
Para poder impregnarse de la Voluntad de Di-s de esta sección, es necesario ser concientes de los principios básicos: La Santidad Divina, el Shabat, el respeto y amor por los padres y por ende por la célula de la sociedad, la familia, la negación y alejamiento de la idolatría, es decir, la búsqueda del sentido fuera de la única causa de la existencia, el mismo Di-s.
Como corolario para poder relacionarnos en la sociedad, nos dirá este sector, que debemos amar al prójimo como a nosotros mismos. De todo esto claramente aprendemos que no hay dos éticas, ni dos morales, la privada y la pública, sino un solo camino donde todas las instancias se unen en la Consagración de la vida personal y comunitaria.
El otro aspecto interesante de esta Parasha es que todo esta dado por Di-s para que lo vivamos aquí y ahora, no en otro lugar, mundo o tiempo, sino en el hoy, donde estemos, con quien estemos. Pero quien puede acceder al nivel de vivencia y comprensión de la kedusha (santidad)? Tan solo los justos…. Solo algunos entonces…. Quienes….?
Di-s hablo al Pueblo de Israel, a todos, sin distinción, El llama a todos, sin distinción, puesto que la causa primera es la mas importante y esta es que El es quien nos Consagra y Purifica, por lo que en El y solo por El la Kedusha se hace accesible.
El principio de la Sabiduría es el Temor reverente a Adonai, Rey Justo y Complaciente, este es el principio del Reino de Di-s, luego sigue la Teshuva (volver a Di-s y sus caminos) y por último, la vivencia de sus mitzvot.
Con inmenso amor,
Iosef Shemi
Rabino Mesiánico

Kedoshim (3)

Esta parasha fue revelada a todo el pueblo en su conjunto, ya que la estima del Cread-r es hacer del hombre un ser consagrado íntimamente a la pureza que le permita unirse a El.

Se puede hacer un paralelo entre Kedoshim y los Aseret HaDibrot, diez mandamientos, de tal manera de comprender el principio de que subyace en los mandamientos y ordenanzas: el hombre ha de esmerarse para alcanzar la Kedusha (santidad) por el simple motivo y causa que Adonai es Kadosh (santo).

Dijo Hillel como resumen de la Tora: lo que odies no lo hagas a tu prójimo….una manera negativa de decir el principio positivo de: amar al prójimo como a nosotros mismos. Siendo esta la esencia de la relación con el otro, desde la cual todo vínculo se vuelve respetuoso. El amor implica perdón y el perdón la no existencia de odio, que es lo que imprime violencia en cualquier relación. Puede un corazón que odia acercarse a Di-s? Por ello la combinación de amar a Di-s se ha de reflejar en amor al prójimo, ya que esa es la esencia del amor divino, y es la causa de la Santificación de la vida, de la consagración de todos los actos al servicio a HaShem.

Somos responsables en buena medida del mundo que nos rodea, y podemos influir en él a partir con el sol de justicia que Di-s ha puesto en nosotros, derramando la lluvia de sus bendiciones a todos los seres creados, por eso Yeshua HaMashiaj nos da la mitzva de ser taamim, íntegros, para alcanzar en nivel de consagración que nos permite unirnos a Di-s.

Con inmenso amor
Iosef Shemi
Rabino Mesiánico