Shemot 5784
Haftara: Ieshaiahu, Isaías, 27:6-28:13, 29:22-23
Masei Shelajim, Hechos 7:17-29
El nacimiento de Moshe trajo luz al mundo. Israel fue obligado a realizar trabajos forzados, cuanto más era la opresión, mayor fue el número de nacimientos que tuvo, cuenta el midrash que las madres tenían sextillizos.
En ese contexto nació el alma de Moshe, quien trajo luz al hogar y vivió unos primeros años conociendo las costumbres y formas de la sociedad que oprimía a su pueblo. Esto le servirá como preparación para ser el portador de noticias a su pueblo: HaShem ha escuchado la tefila de Israel y será llevado a la libertad.
Un ítem importante es el encuentro de Moshe con HaShem; en el silencio del desierto y en la cumbre de una montaña de él, HaShem lo llama a Moshe. Cómo dirigirse a su pueblo en nombre de un Di s que le envía a liberarlo? Necesitaba conocer Su Nombre (en nombre implica la cualidad), y HaShem le refiere uno de sus atributos: Ehie asher Ehei, Soy el que está y estará! Moshe tiene el impulso de negarse, no se siente preparado para tan grande obra, surge Aharon como su ayuda. Yeshua HaMashiaj vive situaciones similares a Moshe, su pueblo era oprimido, desarrolló su vida para liberar a las almas de la opresión del sin sentido, y generó bastiones para el futuro en sus talmidim, discípulos.
La madre de Moshe, Iojebed, sintió que su hijo era un alma especial, Miriam, la madre de Yeshua, lo veía crecer con un desarrollo único, era especialmente elevado. Todas las almas caminan con una oportunidad única: la posibilidad de servir a HaShem y liberar a otros. Hombres y mujeres tienen la oportunidad única de abrir las puertas de la vida interior… todos son especiales y maravillosos… solo se debe sembrar para apreciar todo lo que se desarrolla en el alma… la compañía de HaShem esta con todos ya que El es Ehie asher Ehei, quien esta con cada alma en el pasado, presente y en el futuro!
Con inmenso amor
Iosef Shemi
Rabino